El Frago desde la carretera Luna-Biel
El Calvario y la ermita de Santa Ana en El Frago
Crucero de Valzargas que estuvo situado en el fragal. Dibujo de Rafael Margalé
Pasar por El Frago y no subir a visitarlo, no me parece bien; por ello, cruzo el Arba por el segundo puente que tiene este río desde su cabecera y visito una vez más esta antigua población a 630 m. de altitud, llena de muestras de la comunidad hebrea que vivió en ella hasta la expulsión de los judíos en 1492, y que Nuria Asín García, en su libro «JUDERÍAS, La huella del pueblo elegido» relata con extraordinaria claridad:
La Judería de El Frago se localiza en el Barrio Nuevo, denominación que determina tras la expulsión de los judíos del municipio, y que actualmente coincide con las calles Infantes y San Nicolás. El origen de la comunidad judía de la localidad se remonta a la época de Alfonso I el Batallador, quien otorgó fueros de población al municipio en el año 1115. En el siglo XV vivían en El Frago unos 60-65 judíos, repartidos en quince casas, según datos de Miguel Ángel Motis. Una comunidad pequeña que, a pesar de su tamaño, es poderosa. Así, su actividad económica representa un 1,5 % del total de las aljamas del Reino de Aragón, con grandes fortunas que estaban ligadas a la ganadería.
Hoy mi interés se centra, en conocer las cruces de su calvario en la subida hacia la ermita de Santa Ana y más arriba del cementerio; y sobre el crucero que existió en El Fragal, me limitaré a traer el dibujo que de él realizó Rafael Margalé, ya que actualmente no existe tal crucero entre las altas torres de comunicaciones que hay en ese lugar entre Orés y El Frago a unos 850 m de altitud .
Me llama la atención la sencilla capilla que al pie de la carretera, casi enfrente de la entrada a El Frago, mantiene adornado a Jesús Crucificado, el verdor de las plantas del monte y unas flores artificiales esperando una oración y, creo, que es la única que existe al aire libre en toda la comarca de las Cinco Villas, tras la desaparición de la que hubo en Bagüés de estas características, que estaba dedicada a Santa Orosia y fue comentada en sus libros por Pascual Madoz entre 1845-1850.
Realizada esta rápida visita al pueblo del «Zarrampullo», debo seguir mi camino.
Pequeña capilla al pie de la carretera, junto al El Frago
Sin comentarios