Campanario de San Salvador
.
.
Soberbios ábsides de San Salvador
.
He hablado varias veces de Luesia, la anterior visita fue a :: Santa Eugenia ::; pero hoy, acompañando a este grupo de asociados a CIVITUR, han sido unas visitas muy concretas a las dos principales iglesias, a la de San Salvador, la de los altos ábsides y portada del Maestro de Agüero y a la de San Esteban, hoy Museo Local y Centro de Interpretación del Románico, sin dejar de subir por empinada cuesta, al Castillo, erguido bastión sobre el pueblo, dolido con mil cicatrices que marcan su historia.
Admiro la atención y voluntad de su alcalde y concejales, por darnos a conocer su pueblo en todos los detalles, tanto a través de Alfonso, el guía bien documentado y amable, y de ellos, personalmente.
Desde aquí agradezco su interés.
Quiero resaltar, que tuve la ocasión de conocer y saludar a D. Dámaso Lapetra Cortés, sacerdote jubilado.
Cierto que encontrar un cura jubilado es más normal que encontrar a un seminarista en estos tiempos; pero D. Dámaso, que nació en Luesia hace más de ochenta años, y ha sido párroco de Ansó durante cuarenta y dos, ha dejado precisamente allí, un Museo Etnológico y Arte Sacro que él fundó en 1974, y que bien merece nuestra más sincera felicitación por ello.
Copio de RedAragón el siguiente texto de información:
Ubicado en la iglesia de San Pedro Apóstol –aunque está previsto su traslado a la antigua ermita de Santa Bárbara-, el Museo de Arte Sacro de Ansó fue inaugurado en 1974. Junto al arte religioso se muestra una completa colección de etnografía de la zona. El museo comienza ya en la escalera, donde observamos los primeros objetos ansotanos. Una vez dentro, podemos apreciar piezas únicas, como unos pergaminos con ricas páginas miniadas de los años 1539 y 1545.Del mismo siglo se exponen tallas religiosas, libros parroquiales, libros de coro, una bula pontificia del Papa Gregorio XIV concediendo la patrimonialidad a la villa de Ansó y al pueblo de Fago…Además de los objetos religiosos, el museo expone diversos trajes ansotanos, de personas mayores y niños: de faena, de fiesta, de boda, para oficios religiosos, de bautizar a los niños, de confirmación, de primera comunión, etc. Todos ellos están hechos de lino criado en los campos y lana de una raza especial del ganado. En el pueblo había cinco telares, dos de los cuales se conservan en el museo.También llama la atención el Rincón del Pastor, con su indumentaria típica. Junto a él, una señora con traje de trabajo hilando. Se exponen en esta zona marcas de ganado, esquilas, los moldes para hacer el rico queso ansotano y útiles de cocina. Destacan un armario del siglo XVII; cerámica de Naval, Huesca y Lumbier; un taca-taca para los niños y dos estelas del siglo XV.En otro espacio se recuerda la antigua zapatería, con hormas, útiles para la elaboración del calzado y una máquina de coser marca Singer.Al margen del museo, destaca la sacristía de la iglesia. En el centro, una gran vitrina contiene ternos de los siglos XVI, XVII y XVIII, tallas, códices, portapaces y un misal del siglo XVII encuadernado en plata.
Visita al Castillo. Al fondo la Iglesia de la Virgen del Puyal
Pila bautismal
Púlpito o predicadera todo de piedra
3 comentarios
Buenos días,
¿La fotografía de la pila bautismal que se ve anteriormente es de la iglesia de San Salvador de Luesia?
Yo también le felicito y me gustaría tuviese en cuenta que el fundador del Museo Diocesano de Jaca fue un cura que murió en Navardún y creo era de Cinco Villas. Saludos. Alfonso
Felicidades por tu blog. Es muy ameno y nos mantiene al dia de las cosas de la comarca.
Me alegro especialmente de que disfrutarais en la visita a Luesia, uno de los pueblos más bonitos pero más desconocidos de la zona. Reúne un impresionante patrimonio (da gusto pasear por el pueblo y perderse por las callejuelas) y un entorno natural maravilloso.