Castillo-Palacio de Paules
en término de Erla

Fue Paules un antiguo pueblo cercano a la villa de Erla, a 400 m. de altitud y situado en la margen izquierda del río Arba de Biel, figurando su nombre en documentos del siglo XIV.

En épocas más recientes ha sido una de las grandes fincas agrícolas, de unas tres mil Has., donde compartían vida con los obreros del campo, otros artesanos como guarnicionero, herrero, carpintero, albañiles y otros. Tenía su propia escuela con su maestro, y el cura, no faltaba los domingos y festivos a celebrar la santa misa en la Iglesia anexa al Castillo, para todos los que allí vivían.

Pero en el año 1950 y por razones de división de la finca entre sus herederos, terminó aquella vida de ajetreo y alegre actividad en Paules, quedando vacías aquellas casas, que por las inscripciones que guardan los sobreportales, se construyeron entre los años 1841 y 1848, asimismo quedaron sin actividad y en semiabandono algunas de sus dependencias ganaderas, no así el Castillo-Palacio, que aunque su última restauración data de 1929, está en perfecto estado, cuidado y mimado su entorno por Julian Casabona, cuya vida hasta ahora, ha transcurrido en este emblemático lugar.
Charlamos después de regar su huerto, en el jardín que con su césped recién cortado y sus altos árboles, dan acceso a una tranquila piscina.
Muy próximo al conjunto de edificaciones, existe un esbelto peirón con cruz de hierro, hermoso vestigio de tiempos pasados que encontramos en los cruces de caminos y que ojalá sepamos conservar.