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En tiempos pasados no muy lejanos , cuando una oveja moría, solo hacía falta abandonarla en el monte, con la seguridad de que rápidamente, los buitres y otras aves necrófagas dejarían limpio el lugar de carnes y despojos, porque este era, además de los animales silvestres que mueren en el campo, el sustento de todas esas aves carroñeras, que muy atentas, vuelan los cielos de nuestra comarca.
Hoy, las circunstancias han cambiado, las nuevas disposiciones de salubridad, no permiten el abandono de animales muertos en los montes. Y, según distintas asociaciones ecologistas, las soluciones actuales, aunque caras, no son las más acertadas. (Recoger y transportar cientos de km. los animales muertos y con los mismos medios, llevarles comida para alimentarlos en los montes.)
En nuestra comarca de Cinco Villas, existen dos comederos o muladares, uno en Tauste y otro en Luesia, donde acuden a comer cientos de estas grandes aves, considerándolos insuficientes según detallan, los grupos mencionados, *Leer*
Por esta razón, y no otra, vemos a esta aves merodeando las parideras de ganado lanar y las granjas de pollos y cerdos, llegando a creer, que han cambiado los hábitos de estos animales y no es así.
«Los buitres continúan, como siempre, realizando grandes desplazamientos para alimentarse y se alimentan de cadáveres de animales, de restos o de animales moribundos o imposibilitados para moverse».
Con la construcción de más muladares, o puntos de alimentación, como se promete, esperemos que los buitres vuelvan a su vida normal, sin molestar a nadie.
En las proximidades de Ejea..
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En el comedero de Luesia. Foto de Félix Compaired
Buitre en vuelo ante Las Bardenas. (Foto M.Mena)
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