La vieja raíz de un chopo, embelleció cuarenta años el Parque.
Tras la canalización del río al extremo de la ladera, que antes iba discurriendo por toda la extensión de lo que iba a ser el Parque Central, en los primeros años de 1980, allanando barranqueras y preparando el terreno para su nueva creación, se recuperó esa gran raíz de uno de los grandes árboles que ya había muerto de viejo en aquellos lugares.
Alguien creyó debía conservarse, y allí quedó clavada en el mismo suelo, donde tantos años vivió y creció bajo la tierra, y cierto es, que durante cuarenta años ha embellecido estos espacios, cercanos al puente de San Lázaro y al río Arba de Biel, a cuatro pasos de La Azutilla.
Hoy, y por razones que desconozco, la gran raíz del viejo chopo ya no se encuentra en el Parque Central de Ejea, dejando un vacío en esos entornos, que cada vez es mayor, contemplando que algunos árboles que lo acompañaban, han perdido su vitalidad para renovar sus hojas y ¿están muriendo?.
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