Grupo de devotos de San Gregorio en la ermita de Barués
Una de tantas ermitas que han quedado solas en los montes de las Cinco Villas, es esta de Ntra. Sra. de Barués o Santa Te, que tuvo un importante número de devotos, cuando en su cercanía estaban bien poblados sus pequeños pueblos y sus pardinas o caseríos. El tiempo y la evolución constante en las formas de vida, lo ha cambiado todo. Antonio García Omedes en su página www.romanicoaragones.com, admirado de su paz, sosiego y soledad, ante este restaurado templo románico escribe: «Como tantos otros lugares despoblados de Aragón, nos transmite la sensación de tristeza por lo que fue y ya no es».
En el Libro «Las ermitas de las Cinco Villas de Aragón», que pueden bajar de la Biblioteca de la IFC en formato PDF, se describe esta en las páginas 189-190. Ver Vídeo de la presentación del libro: AQUÍ
Y así como se hace constar en su texto, su romería se sigue celebrando el Día de San Gregorio, acudiendo de distintos lugares sus devotos, que aunque pocos, no quieren se pierda esta tradición que siempre los unía, para pedir protección para sus cosechas y dar gracias a la Virgen y a San Gregorio por cuidar de ellas y sus haciendas.
Un buen amigo, Tomás Sánchez de Castiliscar, cuyos antecesores regalaron la Pila bautismal que embellece este recinto sagrado, procedente de una arruinada ermita de aquellos entornos, me envía unas fotos ante la ermita, de aquel momento, posando unidos ante ella y en la celebración con los sacerdotes de Sos del Rey Católico.
Agradezco el detalle, que me da ocasión de recordar la iglesia de Barués y sus entornos. Y me alegra: ¡Que no se pierdan tan bellas tradiciones, escuchando: Viva San Gregorio!
Ábside del románico templo
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