Situación del partidero de aguas de la acequia vieja del monte
Santiago Bandrés en el viejo partidero
Convencido de que había llevado a mi libro «Cruces, cruceros y peirones en las Cinco Villas…» todos los existentes y desaparecidos en nuestros pueblos, recibí con agrado la felicitación de Santiago Bandrés de Erla; pero, amablemente, en una larga charrada, me comunicó que me había olvidado de comentar uno de ellos que fue muy importante en Erla, conocido como «La Cruz del partidero», por encontrarse ésta Cruz, lindando con el partidero de grandes piedras en la conocida acequia del monte que viene desde Luna, donde se dividían las aguas para regar parte de Erla y, sobre todo, «La huerta de los frailes», que desde el Santuario de Monlora los franciscanos atendían con esmero.
Quiso llevarme a conocer el lugar, muy próximo a la carretera hacia Luna, debajo de Monlora y, muy gustoso le acompañé. Fue una charrada constante sobre ésta y otras temáticas, de las que Santiago está bien informado, por los conocimientos recibidos de sus mayores y por su dedicación a la lectura de libros y documentos. Alguno de los temas que me plantéa, por ejemplo: sobre la desconocida historia de uno de los cruceros bien conocidos en nuestra zona, prefiero sea él quien me la escriba con los detalles que conoce y le pido que así lo haga; yo muy gustoso daré cabida en mi blog a ello en la sección de FIRMA INVITADA.
Volviendo a la desaparecida «Cruz del partidero», me comenta la preferencia que tenía este partidero para mantener un caudal determidado hacia las fincas aguas abajo, como la Casa Alegre, Casa Bentura y tierras y estanca de los Rosel, que fue motivo de importantes litigios por el agua.
En este partidero, a través de un orificio en la parte superior de la gran piedra que aún existe, asoma un vástago de hierro unido a la gruesa chapa que tiene cerrado el curso de la acequia, que desde hace años y por haber quedado inutilizada desde la llegada de las aguas del Canal de las Bardenas a estos campos, tiene olvidados sus menesteres.
Santiago no llegó a conocer el fuste ni la cruz de aquel crucero; pero sí la gran piedra redonda de casi dos metros de diámetro que hizo de basa, en cuyo centro tenía realizado un cuadrado donde debió introducirse su fuste y que perduró hasta hace pocos años, cuando para dejar el campo libre de estorbos fue eliminada con falcas de hierro y golpes de mallo por su propietario. Pero Santiago no olvida el lugar que ocupó y tomamos nota de la situación.
Recorremos distintos lugares de Erla por el antiguo camino de Ejea, agradeciendo a este amigo su buena disposición de ayuda.
Grandes piedras al borde del camino hacia Ejea.
1 comentario
NO ME EXTRAÑA QUE ESTUVIERA CERCA EL PARTIDERO Y QUE LOS FRANCISCANOS PENSARAN EN EL AGUA QUE HABRÍA DE REGAR SU HUERTA DE LOS FRAILES. LA HUERTA DE LOS FRAILES ERA BONITA Y FÉRTIL. DESDE ERLA LOS NIETOS DE LA «CORTANTA» FELICISIMA ANGOY COMÍAMOS VERDURAS Y TODA CLASE DE FRUTAS. PERO LO BUENO ERA «NUESTRO MISTERIOSO AGUJERO DE LA PARTE IZQUIERDA DEL HOGAR BAJO DE LA COCINA QUE SE DECÍA ERA EL TÚNEL QUE MONTE ARRIBA LLEGABA HASTA LA MISMA CIMA DE MONLORA Y QUE NOSOTROS MUCHAS VECES HEMOS SUBIDO MONTE A TRAVÉS SIGUIENDO ESE HUECO A VECES HUNDIDO QUE CALDEABA NUESTRA IMAGINACIÓN. CREO «CON BASTANTE FUNDAMENTO» QUE DICHA HUERTA PASÓ A MANOS DE FAMILIA POLÍTICA DE LAS «CORTANTAS»Y RECUERDO EL DISGUSTO EN MI CASA CUANDO MI PADRE LA QUISO COMPRAR PARA DÁRSELA A MI MADRE YA QUE ELLA QUE ERA LA PENÚLTIMA DE LA FAMILIA ,Y EL MÁS PEQUEÑO QUE FUE CHICO, NUNCA TUVIERON NADA EN ERLA PERO TRAS ALGUNA DISCUSIÓN LA VENDIERON A EXTRAÑOS A LA FAMILIA .