De la cántabra sierra, verticales,
telúricas arterias inconcretas,
emergen por Fontibre las secretas
aguas en borbotones a raudales.
Rompe el Ebro el vagar de sus caudales
por la Rioja y Navarra que, discretas,
amamantan sin tregua las repletas
riberas de manjares vegetales.
Aragón lo remansa en su andadura
y en Ranillas lo amarra recelosa
declarando notoria primacía.
Cataluña en Tarraco se satura
de la preciada linfa y, desdeñosa,
en el salado delta lo vacía.
Soneto seleccionado para el recital Poético sobre el Agua, en Expo Zaragoza 2008
Félix Landa Otal
13-08-2008
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