En un viaje-excursión por las Altas Cinco Villas, coincidí con Manolo, un viejo amigo de Tauste que allí regenta «El Patiaz de la Reina Rana» *Conocer* Un Hostal Rural lleno de encanto, que fue construido en un lugar conocido como «La Balsa de Granero» donde predominaban los carrizos y las ranas, y sin duda, existiría la más cantora, la Reina de las ranas.
Me comentó varios lugares que debía visitar y conocer en Tauste, y para ello, me ofreció su compañía que no dudaré en contar con ella, para conocerlos.
Entre algunos de esos lugares, me habló de «Las Trabas» y como es un lugar que puedo localizar solo, fácilmente, no he dudado en llegarme hoy, ya que paso cerca de él.
«Las Trabas» es el punto donde el Canal tiene unas grandes compuertas para su regulación y atraviesa el río Arba sobre un puente de piedra de singular belleza y robustez, que tuvo un momento de incertidumbre, en una gran riada el año 1992, durante los Juegos Olímpicos de Barcelona. Grandes troncos de árboles, se habían cruzado en el puente, taponándolo e inundando sus aguas todas las huertas, llegando a temer la decisión de volarlo si seguía aquella angustiosa situación, cosa que no ocurrió al romperse los obstáculos y engullirlos el famoso puente.
Recordemos que el Canal de Tauste, fue la primera obra de regadíos de Aragón, que su idea arranca en el año 1252 y que su construcción tuvo muchas vicisitudes hasta poder regar sus tierras.
La segunda mitad del siglo XVI verá nacer a la Acequia o Canal de Tauste, denominada así desde un principio por el protagonismo que la mencionada villa tuvo en su ejecución.
Las dificultades y agobios económicos no terminarán aquí, pues si difícil fue la financiación de la construcción de la acequia, más difícil fue hacer frente a los gastos de mantenimiento y conservación.
La situación fue degradándose hasta tal punto que en 1.775 el Ayuntamiento de Tauste solicita la intercesión de D. Ramón Pignatelli y Moncayo para que la Acequia sea acogida al igual que el Canal Imperial bajo Real Protección.
En 1.780 la Acequia quedó prácticamente inservible. Ante esta situación el rey Carlos III, comisiona a Pignatelli para que resuelva la situación y éste, con la eficacia que le caracterizaba, lleva a cabo las reparaciones y mejoras necesarias, consiguiendo que la Acequia riegue las cosechas de 1.781.
A partir de este momento la Acequia de Tauste quedó incorporada a la Corona, agregándola al Canal Imperial y sujeta a la normativa de este. D. Ramón de Pignatelli se encargó de ampliar la capacidad de transporte de la acequia y de mejorar su trazado, así como de aumentar en una primera fase la zona regada, que paso de 10.000 cahizadas (4.770 ha) a 14.000 (6.678 ha).
Regularizado el funcionamiento, y a petición de los regantes, Isabel II les devuelve la Acequia en junio de 1.848, y un año después es aprobado, por Real Orden, el Reglamento del Sindicato de Riegos de la Acequia de Tauste.
El canal de Tauste toma sus aguas del Ebro en el término municipal de Cabanillas, aguas arriba de la toma del Canal Imperial (a 4.200 m), también situada en el mismo término municipal. Discurre paralela al Ebro, por su margen izquierda, a lo largo de sus 44 km. Su capacidad en origen es de 12,5 m3/s.
La verdad que es un lugar de gran belleza, contemplándo las aguas que trae el canal desde el Ebro, sobre las del río Arba, que recibe las sobrantes del aliviadero, antes de cruzar el puente.
Conocer mejor este Canal de Tauste *Aquí*
Sin comentarios