Castillo de Santia. (Pulsar para ampliar)
Hoy he pasado muy cerca del torreón de Santia; toda la vegetación que lo circunda está muerta, la estanca tiene heladas sus aguas y el cierzo lo azota sin piedad.
Lo veo fuertemente agrietado y en lo alto, en el viejo nido, no está la cigüeña que parecía con su peso compensar su inclinación.
Todos nos deseamos lo mejor al comenzar el nuevo año, y al viejo torreón le deseamos se mantenga en pie, aunque supongo, estará harto de resistir tan larga vida sin que nadie haya hecho nada para mantener su figura. ¿Lo conseguirá un año más? Desde luego, lo más adecuado será aconsejar no acercarse a él, evitando alguna desgracia personal.
En sus proximidades, no hay cartel alguno con esa indicación, pero su imagen desde la carretera, creo que delata ese peligro. Mantengamos la distancia precisa por si llega su final.
Recordemos fotos de otros momentos *aquí* y recordemos, que la primera referencia histórica sea de 1092, cuando su iglesia fue entregada por orden de Sancho Ramírez al monasterio de San Juan de la Peña. En el siglo XVIII era propiedad del conde de Contamina, estando ya abandonado.
Fotos de otros tiempos…
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