Más que solitario sigue siendo un enigmático lugar en una plana libre de árboles, perteneciente a la villa de Biota, aunque enclavado en término de Ejea de los Caballeros, donde nada impide la visión de amplios horizontes y donde han quedado para el recuerdo, regias edificaciones, iglesias románicas y redondos torreones, que dan ese nombre de «Torres del Bayo», pertenecientes en diferentes épocas al linaje de Los Urrea, Condes de Aranda y Vizcondes de Biota.
En diferentes momentos he visitado el lugar, *ver 2007* y más tarde, *Ver más* y siempre encuentras motivos que te hacen pensar.
Si el rey aragonés Ramiro II El Monge en 1146, fundó aquí un monasterio cisterciense. Si durante más de dos siglos así fue, hasta que los mismos frailes, durante las guerras entre aragoneses y navarros conspiraron contra su rey aragonés Pedro IV el Ceremonioso, en favor de los navarros, y este tuvo que expulsarlos del lugar, destruyéndolo todo en 1380, poco ha cambiado aquella imagen.
Delante de la iglesia inacabada, existe una antigua edificación con sus paredes realizadas con piedra sillar, sus arcos de medio punto y su bóveda de piedra, testificando, fue un construcción románica, avalada por expertos como A. García Omedes. Pero, ¿esa antigua construcción delante de la iglesia , no sería una sencilla ermita bajo la advocación de algún determinado santo?
Posteriormente habrá sido necrópolis, por los huecos en sus paredes y alguna estela en sus entornos.
Hoy, junto a ella un joven busca tesoros con un sencillo detector de metales. Yo miro y remiro esta construcción, siendo esta la principal razón de mi visita y ojalá, alguien me pueda aportar datos referentes a esta edificación, que para mi, fue una olvidada ermita, que al no conocer su advocación, bautizaré con el nombre de Ermita de las Torres del Bayo.
1 comentario
Hola José Ramón, por poco no nos encontramos por ahí porque también estuve la semana pasada.
A lo mejor quien nos pudiera aportar algún dato sobre esa o el resto de edificaciones de El Bayo son esos jóvenes y no tan jóvenes que van con detectores, ya que los elementos metálicos, especialmente las monedas pueden proporcionar bastante información. Los furtivos además de, a menudo, destruir el patrimonio, en el mejor de los casos «sólo» lo roban, privándonos a los demás de valiosa información que a menudo ni siquiera saben interpretar, «el objeto por el objeto». Creo que en estos casos lo mejor es advertirles de lo dañino e irregular de su acción y si persisten llamar a la Guardia Civil (mejor directamente al SEPRONA que se encarga de esto), suelen alegar que no están haciendo nada ilegal porque «no están cavando» y/o «están en un campo de su propiedad», pero ninguna de las afirmaciones son del todo ciertas e incluso si no están haciendo nada punible una llamada a la GC suele ser bastante disuasoria.
Un saludo.