Por estar ausente ese día, no pude hablar con Ángeles Palacio alcaldesa de Ardisa, para comentarle mis vivencias por su pueblo y posteriormente, me llamó muy amable, agradeciendo mi interés por el patrimonio de su hermosa villa y por ese pequeño pueblo de Casas de Esper, que le pertenece y donde visité últimamente, su «mina de cobre».
Agradecí su atención y sobre el traslado del Peirón o Cruz de Santa Ana, le manifesté que había sido un acierto quitarlo del lugar húmedo donde estaba en el campo, junto al camino y colocarlo cerca de la entrada de la villa, felicitándola por haber conseguido esta solución sin causar ningún daño a ese peirón de casi cuatro metros de piedra de forma octogonal y bellamente terminado en su cabecera, donde lleva incrustada un cruz de hierro.
Ángeles, que a través de mi página conoce la veintena de «Cruces» o «Peirones» que tenemos en la comarca, considera que había que hacer algo para que la gente los conozca, -editar una guía de los mismos, con su historia, lugar donde estaban o están situados ahora, etc. en fin, una ruta que nos llevaría por los distintos cruces de antiguas vías y caminos en pueblos cargados de historia y belleza.
Por mi parte los iré trayendo a esta ventana para darlos a conocer a quien me leéis.
Sin comentarios