2008, año de Martincho. Antonio Ebassun “Martincho” es la figura taurina más ilustre de Ejea de los Caballeros, nacido en el pueblo de Farasdués en 1708, y que fue inmortalizado por Goya en sus Tauromaquias.
Trescientos años han transcurrido, desde el nacimiento del hijo de aquel zapatero de Farasdués y hoy, en su pueblo, poco extrañaría de su infancia; la misma iglesia donde fuera bautizado el 10 de marzo de 1708 y la misma fuente y sus paisajes, las mismas calles, y como recuerda Felipe García Dueñas en su Libro «Martincho«, subiría por «las escaleretas» a buscar el pan al horno y recorrería el barrio de «la corona» de «la cedadería», y «la plaza alta» con su hornacina de San José; pero seguro le alegraría y agradecería, la creación de ese Centro de Equitación al que se le ha puesto por nombre «Los Caballos de Martincho»
En agosto de 1713 la familia de Martincho ya vivía en Ejea de los Caballeros, siendo su padre uno de los tres zapateros de la villa y allí vivieron, mientras su hijo Antonio se hiciera famoso en las plazas de toros desde 1759 a 1764. Precisamente ese año se inauguraba la Plaza de toros de Zaragoza, construida por Don Ramón de Pignatelli y Moncayo y actuando Martincho como torero destacado. Quiero resaltar lo escrito por García Dueñas, que «durante esas corridas del 8 al 13 de Octubre se mataron en cada una de ellas dieciséis toros de Ejea de los Caballeros»
Se había casado a los 44 años con una joven ejeana de 20, llamada Ramona Mena y después de una azarosa vida, Martincho murió en Ejea de los Caballeros, y aunque no se certifica que muriera por la epidemia del cólera que sufría esta villa, donde murieron 175 adultos y 210 niños entre 1770 y 1773, el 10 de agosto de 1772, fue enterrado en la misma iglesia parroquial de San Salvador.
Estoy seguro, que en las próximas fiestas mayores, 2008, el Ayuntamiento de Ejea y las Peñas Taurinas, como anunció la «Peña La Fura», conmemorarán con diversas actividades, “exhibiciones de tienta tradicional, conferencias sobre tauromaquia y Marticho, becerradas matinales, exhibición taurino-goyesca, exposiciones de pintura, escultura y taxidermia, actividades para niños…” el nacimiento de «Francisco Antonio Basson, Martincho» .
Les deseo los mejores aciertos y éxito en esa iniciativa, recordando aquel artista-torero que Goya inmortalizó.
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