Como quedé en mi anterior escrito, tenía que volver a Biota por conocer mejor esa iglesia que se había descubierto bajo los escombros acumulados al pie del Palacio que fuera de la Familia de los Urrea, Vizcondes de Biota desde 1457, y allí coincidí, entre amigos de la villa de Biota interesados en este hallazgo, acompañando a Silvia Rueda la concejala de cultura, con Carmen Marín Jarauta, la arqueóloga que dirige esta excavación y Fernando Ezquerra, natural de Biota, estudioso y escritor de temas relacionados con el arte románico, que día a día difunde desde la página Círculo Románico.
Parece ser, que todos tenían conocimiento, a través de sus mayores, de que en las proximidades del palacio hubo una iglesia dedicada a la Virgen María o bajo la advocación de la Natividad, que bien puede ser la aparecida.
Fernando Ezquerra, como buen investigador de la historia de su pueblo, recuerda que existe documentación de que en Biota hubo clérigos en el siglo XII y que en 1216, el obispo Guillermo de Santonge de Pamplona, exigía a las «iglesias» del Priorato Benedictino de Biota, sus aportaciones a este Obispado, como a todas las iglesias de la Val de Onsella que pertenecían al mismo. Que existe documento de la compra de una iglesia, por parte de los Urrea, para la edificación del actual Palacio de Biota, adquirido por esta Villa en 1995 por un simbólico precio a la familia Esteruelas, últimos propietarios.
Aporta diferentes citas de Cartularios, como el de Santa María de Uncastillo en 1162, siendo Prior Sancho de Biota y otros documentos, donde se tiene en cuenta «las iglesias de Biota».
Todo lo expuesto, basado en comentarios e informaciones orales, tendrá que ser reconocido a través de la investigación y los documentos que puedan aportar más luz, para el informe definitivo que pueda hacer la arqueóloga que dirige esta obra, Carmen Marín Jarauta.
Confiemos que con todo ello, pueda llegarse a buen término el conocimiento de esta olvidada iglesia románica de Biota, que ha permanecido oculta bajo una escombrera al pie de un Palacio.
Restos de pintura de la época que estuvo en uso aparecen en sus paredes, incluso en la muralla posterior, alguna piedra recuperada de la iglesia, mantiene la misma pintura.
El suelo de la iglesia está cubierto de ladrillos de cerámica como se aprecia en algunas fotos, muy posteriores a la construcción de la iglesia, que está datada a finales del siglo XII.
Carmen Marín Jarauta.
1 comentario
Como siempre, Pepe Ramón, en tu línea, informando de forma magnífica por el bien común de todas las Cinco Villas. Muchas gracias de todo corazón.
Espero que estas navidades nos podamos volver a encontrar para hablar un poco más. Además, así, te cuento y preciso algunos datos.
Seguramente, no todas las sorpresas de esta iglesia se han acabado.
Muchas gracias por el magnífico reportaje y por el buen rato que pasamos todos juntos.