Aquí no había estado antes y debo hablar de él, del molino de Asín. A la ermita, que está más separada del pueblo, fui por el camino alto y no lo visité entonces, pues pasé por él a más altura.
Hoy lo visito y veo, que exteriormente está bien cuidado, aunque su interior tiene muy deteriorada su maquinaria, como me hacen constar sus vecinos.
Casi enfrente del molino existe un montículo, que por su parte suroeste, es un acantilado de grandes piedras, y sus lados norte y este tiene una pared de piedra apoyada sobre la tierra, que da sensación de ser un lugar defensivo, cuando en realidad en una pequeña planicie, denominada «Era de Santa Cruz», pues allí se trillaban las mieses en tiempos pasados.
Hay referencias de que en ella, había un aljibe árabe que lo taparon y plantaron un almendro. Lo cierto es que la era está empedrada, con pobre vegetación en la misma, bien expuesta a los vientos y desde donde se divisa un hermoso paisaje.
Frente a este lugar están las piscinas y abajo, junto al barranco, «La fuente de las escaleras» y un antiguo puente, que deja en el conjunto un plácido y húmedo ambiente medieval.
Vale la pena dejar constancia de esta visita y este rincón otoñal.
2 comentarios
La citada fuente de las escaleras , hace años cuando era niño y adolescente , se conocia como la fuente vieja
En la era de Santa Cruz se conserva una hermosa cruz de piedra (puede ser los restos de un crucero). Al parecer, en su emplazamiento se erigía un pequeño y antiguo monasterio o convento.