Hoy está el día con fuertes chubascos y rachas de cierzo en el llano y en la Sierra de Santo Domingo se traduce en ventisca de nieve, que deja blancas sus laderas.
Seguro que la ermita de San Miguel de Liso, recostada al este de estos montes estará nevada y solitaria.
No ocurrió así el pasado domingo, con un sol espléndido y unos cielos limpios, que permitían ver con claridad el Moncayo desde los 972 m. de altitud.
De soledad nada, hasta tres coches juntamos en la explanada y otros que continuaron el camino hacia arriba, además de los que subían cuando yo bajaba. A San Miguel de Liso no le faltan visitas, gracias a la buena pista existente para llegar allí; pero quiero imaginarme este lejano lugar, antes de construir estos caminos; solamente senderos entre bosques y malezas y arriba, una iglesia del siglo XII, donde estuviera » La Noble villa de Eliso», citada así por Ramiro I el año 1042.
Creer que Dios está en todas las partes, es siempre primordial; pero debió de serlo, más fuerte y consistente en la fe de aquellos moradores, para levantar un templo, en un lugar tan apartado e inhóspito.
Entre los visitantes de este día, he conocido a la familia Fontanals, que aunque residentes en Cataluña, por razones de familia y actividad de trabajo, visitan con frecuencia Fuencalderas y su entorno.
Me llevo los recuerdos exteriores de esta ermita, los restos de un románico ábside, de una fuente con el nombre de este santo, de unas águilas volando en las alturas y unas vistas preciosas, mientras escucho, no muy lejos, las esquilas de unas vacas entre el matorral de las laderas.
No me extiendo para buscar su historia y más detalles, lo ideal es recomendarles que visiten y lean, lo estudiado y escrito por A. García Omedes en www.romanicoaragones.com y visiten despacio, San Miguel de Liso. Vale la pena.
1 comentario
Hola!
Me ha hecho mucha ilusión que te acordaras de nosotros en nuestra visita a San Miguel de Liso. Es en verdad un lugar privilegiado y me alegro de que mi hermano nos haya dado la oportunidad de conocerlo.
Felicidades por tu blog y por la página, vale la pena.
Una abraçada des de Barcelona.
Jordi