Te veo, Ejea
Siento que no hay mar ni frontera que separen mi vida de tu vida.
Puedo ser náufrago y sentirme isla que salve mi deriva.
Puedo ser nómada y sentirme hogar que acoja mi exilio.
Cierro los ojos y sueño.
Sueño que tus torres son brazos que mueven la línea del horizonte.
Cuando vuelvo, me dan la bienvenida acogedores.
Cuando me voy, se despiden entrañables y amorosos.
Sueño que dos ríos, como amantes, buscan un lecho común donde encontrarse.
De sus vegas surgen paisajes de la infancia,
huertas fecundas, sotos húmedos y parajes familiares.
Sueño que me abres confiada las puertas de tus casas.
Del paseo por tus calles me nacen los afectos
y vuelven los días, los recuerdos, las personas.
Abro los ojos y veo.
Veo los ocres del barbecho, del cultivo los verdes, los azules del cielo.
Amo tu paisaje, la vitalidad del cierzo, el bochorno cálido
y el olor de tu tierra en las tardes de tormenta.
Te veo, Ejea.
Cada vez más cerca.
Vuelvo a mi casa natíva.
Eres la otra madre que me espera.
Isla y hogar, regazo y beso.
Madre, Ejea.
Cierro los ojos y te siento.
Cierro los ojos y te sueño.
Abro los ojos y te quiero.
Mª Ángeles Casalé Giménez
Con la Música compuesta por Sergio Giménez Lacima, fue Pieza Obligada en el Certamen Coral de Ejea en 2015. *VER*
Sin comentarios