Pudo ser en el Parral, el Hospital de Peregrinos
Aunque tuve verdadero interés en ello, no pude concretar si este antiguo y maltrecho edificio, había sido una de las ermitas que tuvieron por nombre el de un santo o una santa, de las ermitas desaparecidas en la villa de Uncastillo, para llevarlo a mi libro: «Las ermitas de las Cinco Villas de Aragón».
Sí conocía el nombre de el lugar, Los Parrales, lleno su entorno de profusa vegetación y rebrotes de viejos árboles y, el buen edificio que fue, con entradas de medio punto y sus dovelas de piedra arenisca en ellas, como en toda su parte baja y sus esquinas. Y no olvido la copla que mantienen en esta población dedicada a este lugar:
«Tres cosas tiene Uncastillo que no las tiene Madrid:
El Parral y la Medina y la Huerta Bardají «.
Pero leyendo el nuevo libro de Luis Barreiro Bordonaba. » Los Caminos peregrinos en las Cinco Villas», llegas a comprender que lo que fueron estos edificios cercanos a las poblaciones, siempre acompañados de rectos y verdes cipreses, fueron los albergues, hospitales y lugar de descanso de los peregrinos que recorrían nuestros viejos caminos de penitentes.
Luis Barreiro nos relata en su libro:
«Hasta bien entrado el siglo XI la hospitalidad con los peregrinos era casi exclusivamente propia de los monasterios, pero a partir de ese momento se multiplicaron las fundaciones de hospitales hechas por obispos, órdenes religiosas y militares, monarcas, nobles, municipios o particulares. Estos edificios son muy abundantes en las vías de peregrinación y, muy especialmente, en la jacobea, por lo que su presencia puede servirnos como indicio de la existencia de un itinerario de peregrinación.
El concepto medieval de hospital es diferente al que tenemos hoy como un centro de recuperación de la salud. Entonces era un lugar frecuentado por pobres, enfermos, marginados y viajeros. Se encontraban tanto en los grandes centros urbanos como en pueblos pequeños. La asistencia era gratuita y de ella se encargaban hospitaleros voluntarios o asalariados. Podían ser financiados por la monarquía, la jerarquía eclesiástica, parroquias, cofradías o municipios y eran la principal representación de la caridad cristiana hacia los necesitados.»
«En los Apuntes que presentó fray Mateo Suman entre 1800 y 1802 a la Real Academia de Historia para la confección de un Diccionario Geográfico del Reino de Aragón se incluye un cuadro sinóptico elaborado por Juan Ferrari de Páramo en el que se da cuenta de los hospitales que existían en la comarca por aquellas fechas e incluye catorce: dos en Ejea y uno en Sos, Tauste, Uncastillo, Sádaba, Murillo de Gállego, Longás, Biel, Salvatierra de Esca, Luna, Undués de Lerda, Biota y Luesia». (Ver en PDF: Los Caminos Peregrinos de Cinco Villas)
Albergue Municipal de Peregrinos en Undués de Lerda
Actualmente, de los treinta y un pueblo de nuestra comarca de Las Cinco Villas y de los 14 hospitales que existieron en ella, sólo uno recuperado en el abandonado pueblo de Ruesta, y en Undués de Lerda, por donde pasa el Camino Jacobeo procedente del Somport, se mantiene una de estas edificaciones, «fundado por Martín García, un piadoso vecino del pueblo, en beneficio de pobres y transeúntes-» Está restaurada y bien atendida desde el 2012.
Después de la lectura de «Los Caminos Peregrinos de las Cinco Villas», de Luis Barreiro, las dudas que mantuve sobre este edificio de Uncastillo y que sólo llevé su foto a las páginas de mi libro de «Las ermitas…», me satisface incluirlo como Albergue u Hospital de Peregrinos, considerando que esta titularidad es la más acertada .
También Francisco Fernandez Sanchez, en su Blog de Uncastillo, nos deja unas claras alusiones sobre estos lugares, que potencian más esta idea: «A la entrada de Uncastillo, tanto del camino de Salas como del camino Francés existen dos edificaciones en piedra de sillería con un ciprés al lado. Una está en el lugar denominado El Parral, junto a la que es hoy carretera de Luesia. La otra se encuentra en la confluencia de río Cadena con el barranco de los restaños, el lugar se conoce como “las vivas”. Con el ciprés se indicaba que era lugar de alojamiento para peregrinos».
¡Ojalá así sea!
Viejo y buen edificio en «El Parral». Uncastillo.
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